La Seguridad Privada debe reforzar la formación para los Vigilantes de Seguridad como herramienta de mantenimiento del empleo y mejoras de sus condiciones laborales
La transformación tecnológica obliga a reforzar los canales de formación para el colectivo de seguridad privada en nuestro país tanto en el ingreso como durante su permanencia en la profesión como herramienta de adaptación al cambio y ante los nuevos retos tecnológicos.
Desde el Sindicato de Seguridad Privada y Servicios Auxiliares de FESMC UGT se viene insistiendo en el ámbito institucional de la necesidad de abordar una mayor formación para el colectivo de vigilantes de seguridad en nuestro país como elemento de anticiparse al cambio tecnológico que en la actualidad ya está implementándose progresivamente en el sector de la seguridad privada.
UGT apuesta por la formación profesional como elemento de acceso a la profesión. Una formación profesional que sea capaz de ejercer un elemento de carrera profesional dentro de la seguridad privada y que aglutine conocimientos tanto en el ámbito de la seguridad privada tradicional, como en los conocimientos de todas aquellas tecnologías vinculadas a la seguridad privada y que fruto de la trasformación digital que acontece cada vez con mayor fuerza en el ámbito laboral en general, sirva como garante de avanzarse al cambio.
La formación de reciclaje que para el sector es obligatoria y con carácter anual debe orientar su impartición hacia acciones formativas orientadas en igual forma a la adaptación de los vigilantes de seguridad en activo a los nuevos retos que deberá afrontar la profesión en los próximos años. Un sector más tecnológico, más profesionalizado y con capacidad de mejorar sus condiciones de empleo, sociales, laborales y económicas fruto de una mayor especialización.
El Sindicato de Seguridad Privada y Servicios Auxiliares de FESMCUGT sigue insistiendo tanto en el Ministerio de Interior, Ministerio de Educación y propias asociaciones empresariales de la necesidad de adaptar sin dilación al sector de la seguridad privada ante la transformación digital y tecnológica que con más fuerza si cabe tras el inicio de la pandemia imprime velocidad transformando progresivamente determinadas actividades laborales y donde la seguridad privada también quedara afectada.