La clase política de este pais no debe seguir utilizando a la seguridad privada con fines puramente partidistas
El incorporar seguridad privada como apoyo a distintas policías locales entra dentro de la legalidad y no debe ser utilizada por una clase política que en líneas generales no se ha preocupado nunca por este colectivo
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Lo ocurrido en el ayuntamiento de Marchena en cuanto a la contratación de seguridad privada como medida de apoyo y complementariedad con la policía local no es un hecho aislado de este municipio y no puede quedar reflejado como un incumplimiento de Ley tal y como han intentado difundir miembros del PP andaluz.
Precisamente un partido político que a nivel estatal demostró durante este verano una falta total de compromiso con la seguridad privada haciendo todo lo posible para que este colectivo no accediera al control sobre las playas en el territorio nacional, situación que hubiera permitido mantener empleo en una situación de crisis económica y que hubiera generado sin duda una mayor seguridad para los ciudadanos y ciudadanas que acudieron a estos espacios.
La complementariedad entre la seguridad pública y privada queda contemplada en la propia Ley y no debe ser políticamente utilizada para generar conflicto entre dos colectivos que pueden convivir perfectamente sin confrontar en funciones que quedan suficientemente delimitadas.
Ayuntamientos en Cataluña, Baleares ya viene prestando este servicio compartido a plena satisfacción para la ciudadanía, incluso durante el estado de alarma en el confinamiento la seguridad privada a instancias del Ministerio de Interior colaboro con las FCSE y con el Ejercito en servicios relacionados con el acceso al transporte público.
Afrontar el Reglamento de Seguridad Privada, la búsqueda de soluciones hacia las continuas agresiones sufridas por los vigilantes de seguridad, introducir elementos de formación profesional como ingreso a la profesión así como contratos de relevo como forma de salida digna de la profesión, resultan elementos vitales para el presente y futuro de la actividad donde la clase política debería centrase en lugar de buscar desde algunos ámbitos políticos crear problemática gratuita donde no existe.
